Siempre hay alternativas sexuales al más estilo "50 Sombras de Grey" que abarcan una extensa variedad de manifestaciones diferentes en la cultura BDSM.
BDSM se basan en el consenso, seguridad y sensatez de quienes lo practican y distinguiéndose sustancialmente de expresiones como sadomasoquismo utilizadas por los psiquiatras.
En la actualidad las prácticas sexuales alternativas DBSM van adquiriendo popularidad en nuestra cultura. El éxito de éste fenómeno supongo que ya lo conocéis, la novela de la autora británica E.L. James 50 sombras de Grey. Este fenómeno ha desvelado en el público femenino una mayor curiosidad por los juguetes BDSM. El ineterés por iniciarse en estas prácticas eróticas y fantasías sexuales aumenta en España.
El Bondage en el entorno BDSM consiste en las prácticas donde se establece un vínculo entre roles verticales de poder como por ejemplo amo-esclavo, jefe-empleado, maestro-alumno, policía-detenido, dueño-mascota. etc. El vínculo de unión entre ambos consiste en las ataduras y restricciones con propósitos eróticos. Los disfraces eróticos, las esposas y otros complementos bondage acompañan a estas prácticas.
El concepto Disciplina BDSM se relaciona con prácticas eróticas bajo reglas, castigos, protocolos de comportamiento, adiestramiento, posturas, etc.
En la Dominación, dentro del contexto BDSM, una persona adquiere el rol de dominante para llevar a cabo su deseo o voluntad sobre otra persona o personas que actúan bajo el rol de sumisos. Se trata de una dominación controlada constantemente bajo un consenso y límites fijados por las personas sumisas. El BDSM rechaza toda práctica de dominación que no cuente con este consenso.
La Sumisión hace referencia a las prácticas eróticas donde los participantes adquieren el rol de sumiso dominados por otra persona dominante y bajo su voluntad. Siempre será una sumisión voluntaria y con los límites establecidos donde el rol de sumiso obedece o deja que se actúe sobre su cuerpo.
El Sadismo, en este contexto, se define como las prácticas eróticas en donde se busca el placer provocando dolor, humillación o incomodidad a otra persona que acepta la situación. Pero siempre consiste en prácticas voluntarias con límites establecidos y que pueden parar en cualquier momento. La persona que adquiere el rol sádico controla en cada momento la situación de la persona sumisa con el fin de evitar cualquier daño. Esta práctica erótica no tiene nada que ver con el término sadismo criminal. un látigo de cuero suave.
El término Masoquismo enmarcado en el BDSM hace alusión a las personas que experimentan el placer mediante el dolor, la humillación o incomodidad provocada normalmente por otra persona que acepta esa situación. Siempre consiste en prácticas que no pueden ir más allá de los límites establecidos. Sentir la cera de una vela derramándose en tu piel entre besos y caricias es una iniciación perfecta. Otros elemento muy conocido en estas práticas son los látigos y las fustas.
Estas prácticas de humillación y dominación erótica al margen de su implicación deben entenderse como una forma de libertad sexual y placer mútuo. Lo más normal es jugar mezclando estas prácticas con otros juegos eróticos o sexuales en un entorno de pareja.
No es necesario llegar a límites extremos para que una pareja se inicie en estas prácticas. Todo el mundo puede descubrir su lado BDSM junto con su pareja de confianza para abrir nuevos horizontes en sus relaciones sexuales.
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