La sexualidad femenina es tan amplia que cada día vamos siendo más conscientes de las infinitas posibilidades que presenta. Si ya llevamos años debatiendo entre los orgasmos vaginales o los orgasmos clitorianos ahora nos aparece un nuevo invitado en escena; el tan mencionado y buscado punto G.
¿Existe o no existe el famoso punto G femenino?
Responder a esta pregunta es sencillo porque “SI” existe, como así afirma su descubridor Ernst Gräfenberg que allá por los años 40 con sus investigaciones sobre el aparato genital femenino, descubrió una zona erógena en la pared anterior de la vagina, en torno a la uretra, que relacionó con el orgasmo y la eyaculación femeninos en su artículo “The role of the urethra in female orgasm” (International Journal of Sexology, 1950; 3: 145-148). Y tiene su lógica, ya que Máster y Johnson ya nos indicaron que en realidad solo había un tipo de orgasmo y que el estímulo, procediera de donde procediera sacudía la zona del sacro hasta el córtex cerebral y de éste a la zona del placer que aporta el sistema límbico. Ya sabemos por estudios posteriores que aunque el proceso sea éste, en realidad sí hay diferencias en los diferentes orgasmos que puede tener una mujer.
Perry y Whipple (1982), describen dos tipos de orgasmo, uno vulvar y otro uterino. El primero sería el habitual descrito por Masters y Johnson y el segundo, puesto de manifiesto por electromiografía, se provocaría por estimulación del punto G vaginal y se correspondería con el orgasmo profundo descrito por Tordman (1981).
¿Dónde se encuentra el punto G de la mujer?
Lo cierto es que estar está y su localización es a unos tres centímetros en la parte superior de la vagina. Nada como un buen gráfico para localizarlo:
¿Cómo estimular el punto G?
Ahora que lo tenemos localizado hay que aprender a mimarlo, para eso existen distintas posturas y diversos dildos especiales que sirven para estimular el punto G del placer. Tan importante es aprender como usar correctamente un vibrador para masajear la zona como las posturas adecuadas para estimularlo con la pareja.
Es básico el uso de estimuladores indicados para el punto G, son diferentes a los convencionales, ya que su forma, tamaño y lo más importante su angulación, lo hace ideal para este tipo de automasaje.
Es necesario aprender cómo usar correctamente el vibrador ya que este aprendizaje te ayudará a encontrar el punto G en la mujer. Recomiendo que si tienes pareja realices juegos eróticos con él; no basta que tu sola te investigues y lo realices, si además tu pareja aprende a usar los estimuladores especiales de punto G aprenderá mucho más sobre el sexo y como satisfacerte.
Por supuesto esta práctica, tanto en pareja como en soledad, con estimuladores o sin ellos es algo más que añadir a la riqueza de sensaciones que puede percibir la mujer. Recordemos que el cuerpo y sobre todo la piel es una fuente extensa de terminaciones nerviosas y como no, también las tiene el punto G, que además es un órgano conocido por su capacidad de provocar sensaciones de placer y un orgasmo intenso con su estimulación a través de la pared frontal de la vagina. Su estimulación se relaciona con la eyaculación femenina.
¿Estimular el punto G es sano?
Como siempre recordar que el sexo es salud y claro está el estímulo del punto G es algo más que añadir ya que como toda actividad sexual actúa sobre el sistema sanguíneo y linfático, mejora las defensas. Tener sexo por las mañanas aumenta y fortalece anticuerpos que se encargan de la protección inmunológica y nos protegen frente al ataque de los microorganismos patógenos.
De la misma manera que la salud psicosocial ya que evita la ansiedad y mejora los estados de depresión, pero sobre todo socializa.
Es maravilloso ver como la mujer avanza en el conocimiento de sí misma; y no solo ella, cada vez aumenta más la preocupación por conocer cómo funcionan las mujeres, no sólo biológicamente sino psico-socialmente. La cultura ha tenido enclaustrado al sexo femenino durante milenios y es hora de decir basta ya, explora tu potencial, se feliz, haz que te proporcionen placer y proporciónatelo tu misma. Salir de esta herencia cultural y enseñar al subconsciente de que el sexo es algo que ocultar es difícil pero no imposible.
La mujer del S.XXI es afortunada; no ya solo por la liberación sexual que comenzó hace más de 50 años y aún continúa la lucha, sino porque es una era de avances médicos y tecnológicos, por tanto haz uso de esta tecnología, usa estimuladores y vibradores para tu punto G, aprende a localizarlo y enseña a tu pareja sexual donde lo tienes; no dudes en aprender y si tienes dudas acude a tu terapeuta sexólogo que seguro que te ayuda, pero sobre todo no dejes de buscar el placer.
Carlos Horrillo
Terapeuta Sexólogo de KISSmyLOVE y antropólogo social