Cuando una pareja lleva mucho tiempo junta, la rutina suele estar más presente en sus vidas. Por eso, algunas deciden proba nuevas experiencias incluyendo en su vida sexual accesorios para la dominación y el bondage. Para los amateurs en estas practicas sexuales, las esposas para cama pueden ser un excelente juguete de iniciación. Más adelante y con la práctica, si ambos se sienten cómodos y atraídos por experimentar más pueden ir subiendo de nivel poco a poco.
Atarse durante las relaciones sexuales son acciones que contribuyen a estimular nuestra imaginación y a aumentar la excitación. Atar a la pareja (o que te aten) es uno de los juegos que mejor contribuyen al erotismo en la relación.
Esposas para cama: algunos consejos
El objetivo de las esposas para cama está claro: tener a tu pareja totalmente a tu disposición, sin capacidad de moverse frente a tus ataques sexuales. Hablamos de dominación y sumisión: tu pareja cede su capacidad de decisión y queda en tus manos. Evidentemente hay límites a esta dominación, por lo que te recomendamos hablar con tu pareja antes para que queden claros estos límites antes de empezar.
A la hora de usar unas esposas para cama tenemos varias opciones: esposas de tela, esposas de cuero, esposas de peluche... Elegir las que más os gusten, siempre revisando que sean seguras y que no os dañen las muñecas, procurar no apretarlas demasiado para no causar daño, a menos claro que eso sea lo que ambos deseéis.
Para que el juego sea aún más atractivo podéis jugar a ser otra persona y comportaros de otra forma. Por eso, siempre recomendamos los juegos en pareja: de rol, de dominación, etc.
Una buena forma de comenzar los juegos es sentando a tu pareja en una silla y esposando sus manos en la parte trasera. Entonces puedes proceder a llevar a cabo juegos eróticos como el sexo oral, realizar un baile erótico u ordenarle que te complazca en ciertas cosas para ganarse la liberación. Estar atado sin poder tocar a nuestra pareja cuando nos apetece es un acto que puede llevar a niveles extremos el deseo.
Otra forma de sacar buen partido a estas esposas es atar a tu pareja a la cama. En esa postura podrás realizar toda clase de juegos sin que él o ella puedan moverse demasiado, una idea perfecta para quienes quieren iniciarse en el bondage.
Esposas de tela, esposas de cuero... ¡Elige las tuyas!
En Kiss my Love tenemos todo lo necesario para hacer todas vuestras fantasías realidad. En el caso de las esposas para cama, si sois principiantes os recomendamos usar las esposas de tela guilty pleasure luxurious, unas esposas de tela con cierre de velcro, cómodas de llevar, sin riesgos de roces y perfectas para juegos bondage en pareja.
Por otro lado, tenemos un kit de esposas de cuero bondage, que sirven para inmovilizar muñecas y tobillos. Las correas se pueden ajustan a todo tipo de camas y los puños vienen con cierre de velcro.